El 24 de mayo de 2000, una emboscada guerrillera acabó en Sierra Leona con la vida de Miguel Gil Moreno. Perdió la vida junto a su compañero de profesión, Kurt Schork. Miguel desarrolló su labor profesional como camarógrafo y corresponsal de guerra en numerosos frentes de batalla como Bosnia, Kosovo, Congo, Liberia, Ruanda, Sudán, Chechenia y Sierra Leona.
Tras la muerte de Miguel, al comprobar la enorme repercusión nacional e internacional que provocó así como el trabajo que Miguel había realizado en favor de las víctimas de los conflictos armados, su familia decidió continuar con su labor y legado de solidaridad, denuncia y compromiso con los que sufren.
Nació así la Fundación que llevaría su nombre “Fundación Miguel Gil Moreno”.
La Fundación Miguel Gil Moreno es una Fundación Privada sin ánimo de lucro. Se constituye el 14 de marzo de 2002 y se inscribe en el Registro de Fundaciones Privadas de la Generalitat de Catalunya, con el número 1.632.